lunes, 26 de mayo de 2008

¿Quién anda ahí?

Un saludo a todos de todo corazón. Lo que hoy me gustaría expresar lo haré en forma de cuento/metáfora lleno de conceptos universales:
- ¿Quién anda ahí?
- Soy yo.
- ¿Quién?
- Santiago, soy Santiago.
- Bueno éso es sólo un nombre. Totalmente arbitrario, impuestos por tus padres posiblemente, y compartido por miles de otros santiagos en el mundo. Pero no responde a mi pregunta.
- Bueno... soy médico. Tengo una especialidad importante que me da una buena posición social. Gano mucho dinero. Tengo dos casas y una gran colección de coches...
- Me alegro mucho por ti, pero ése tampoco eres tú. Es una actividad que has desarrollado quizá con esfuerzo y no está carente de mérito. Además esas pertenencias de las que pareces estar tan orgulloso no son sino cosas impermanentes. Hoy son tuyas, mañana... quizá ni siquiera estés aquí y pasarán a manos de otra persona. Todo lo que tiene causa es sensible a cambiar cuando ésta desaparece. Pero en realidad eso tampoco responde a mi pregunta. ¿Quién anda ahí?
- Soy fiel marido y padre de dos hijos. Ellos son mi vida.
- Me parece muy bien que respetes el compromiso que tú mismo escogiste. Así ha de hacerse con todos los compromisos morales. Evita hacer sufrir a los demás. Pero creo que el mundo está lleno de padres, madres, hijos, maridos y esposas. Después de tantas reencarnaciones podría decirse que todos los seres sintientes alguna vez han sido la madre amorosa que me dió la vida y me cuidó. Y es por ello que trato a todos los seres con amor y respeto. Lo siento pero eso sigue sin responder a mi pregunta.
- Yo soy mi alma imperecedera.
- ¿Tu alma dices? Me gustaría que me dijeses en que parte de ti está esa alma tuya. O mejor aun, díme que parte de tu cuerpo, por ejemplo está carente de ella. Si te cortase una pierna... ¿cortaría un pedazo de tu alma?
- Yo... creo que no.
- ¿Me estás diciendo que tus piernas no forman parte integral de ti mismo? ¿Puedes prescindir de ellas?
- No sé... estoy hecho un lío. No puedo pensar bien.
- Además... tengo entendido que a lo que tú llamas alma no es otra cosa que el conglomerado de todas esas tonterías que me has ido diciendo al principio de nuestra conversación. ¿En serio crees que todo eso sobrevivirá a la muerte? Sea como sea no has contestado a mi pregunta. ¿Quién anda ahí?
- No lo sé. Sinceramente no lo sé.
- Muy bien hijo mío. Empiezas a mostrar sabiduría. El camino se va mostrando ante ti. ¿Quién anda ahí?
- ¿Quién es el que pregunta?
- Ahora hablas como un maestro.
Gracias a todos por estar ahí fuera.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué es un Maestro?
Tuvimos tantos maestros y nos defraudaron......

Cuando se sigue un camino, desparece el caminante

mariola dijo...

Hola Luis Miguel:
Bueno, muy bueno, aunque mejor será no intentar la respuesta, evidente.
Si lo intento, me dejaré fuera demasiadas cosas.
Muchísimos besos a todos.

Luis Miguel dijo...

Querido amigo jamyang, bienvenido. Siéntete libre de volver a escribir siempre que quieras.
Los maestros son sólo una fase del camino. No son siempre necesarios, aunque en algunos casos puedan ayudar con un empujoncito.
Cuando se sigue un camino, desaparece el caminante...
No hay camino ni caminante, sólo la luz resplandeciente.

Mariola, creo no haberte entendido muy bien, y si no es molestia, me gustaría que explicases un poco qué quieres decir con que dejarías fuera demasiadas cosas.
Gracias por vuestros comentarios.

mariola dijo...

Hola otra vez: Luis Miguel, creo que sí me has entendido, pero lo explico igual.
Si intento responder quien soy yo, ya utilizo mi mente para ello, y mi mente responderá con sus esquemas, con sus recuerdos, sus prejuicios, sus miedos...
Yo no soy mi mente ni lo que mi mente crea, aunque mi mente forme parte de mí.
Además, visto que cambio al ritmo que vivo, lo que hoy diga de mí seguramente mañana estará caduco.
Muchísimos besos a todos.

Pedro Estudillo dijo...

Magistral, como siempre, José Luis. No dejarás nunca de sorprenderme.
Permíteme que deje otra frase de Buda que he recordado al leer el comentario de "jamyang": "Las enseñanzas son como una balsa, sirven para hacer un recorrido, pero nunca hay que atarse a ellas."
Por cierto, ¿soy yo el único que no puede entrar en el blog de Paulo Coelho "Guerrero de la luz"?
Si sabéis algo, decídmelo, por favor.
Un fuerte abrazo.

Luis Miguel dijo...

Pedro, no sé, la verdad es que hace un momento me he podido conectar con guerreros sin problemas a través del enlace que tengo en este mismo blog.
Prueba a ver.
Gracias por tus palabras.