domingo, 17 de agosto de 2008

¿Qué es el pensar? - 2ª Parte

Un saludo a todos desde el corazón.
¡Fantástico!
Gracias de antemano a los siete participantes, hasta el momento, en este "debate" que iniciamos sobre el pensamiento, sobre el acto de pensar.
Antes de nada, os hubiera pedido que dejaseis atrás todos los prejuicios, las religiones, y las creencias. Pero soy consciente de la dificultad de mi pedido. Iremos caminando paso a paso. Intentando arrojar luz sobre este tema apasionante.
Comencemos por el principio.
Resumiendo un poco vuestra participación, creo que han surgido estas diferentes cuestiones:
1- La existencia (o no) de pensamientos voluntarios e involuntarios.
2- El pensamiento como interpretación de un factor externo a la persona.
3-El pensar como un movimiento de la mente diferente al sentir, o al percibir. Hay pensamientos malos y buenos (en cuanto a su capacidad de provocar sufrimiento).
4- ¿Es el pensamiento un acto diferente del lenguaje hablado?
5- Pensar es comparar.
6- Pensar es comparar, como en el supuesto anterior, pero en base a comprobar enunciados pre-establecidos.
7- El ego y el pensar entidades relacionadas, iguales o dependientes.
¿Me he dejado algo atrás?
En este momento considero que nada sé sobre el pensamiento. Quiero averiguarlo por mí mismo. Quiero saber hasta donde puedo llegar. Esta actitud es muy importante. No quiero comprobar si mis creencias son correctas. Si poseo la verdad. Lo primero es admitir que nada sé.
Puede que tenga muchos conocimientos. Pero, sinceramente, esos conocimientos no son míos. Me los dieron, ya fuese un maestro, un sacerdote, o un libro sagrado. Me dijeron:"esto es así" y puede que lo creyera. Puede que haya hecho de esos conocimientos una bandera. Pero creo que no estamos aquí para demostrar nada de eso.
Por eso, lo primero, es admitir que nada sé.
Y ahora nos preguntamos, ¿qué es el pensar?
Cuando alguien te pregunta "¿Cómo te llamas?", tu nombre aparece en tus labios de inmediato. ¿De dónde surge la respuesta? Creo que hasta aquí todos estaremos de acuerdo, que de la memoria.
¿Y qué es la memoria? Pues el conjunto de TODO lo que nos atañe a cada uno como persona: recuerdos, experiencias, creencias... TODO lo que ha sucedido desde el nacimiento hasta este preciso momento.
Osea, que tenemos un estímulo, la pregunta, que ha provocado una reacción en la memoria. En este caso de respuesta rápida.
Ahora imaginemos otra pregunta. ¿Cuántos kilómetros hay entre Madrid y París?
Ahora es posible que la mayoría dudemos unos instantes antes de responder. De nuevo la memoria se pone en marcha. Quizá sepamos exactamente la respuesta. Quizá ésta sea interpretada, aproximada, ¿verdad?.
De nuevo un estímulo estimula la memoria. Busca una respuesta y si no la tiene de inmediato, la busca. Hasta con inexactitud quiere siempre responder.
Entonces, quizá, y empezando por el primer punto, haya tantos pensamientos como estímulos se puedan recibir. Hay estímulos de los que somos totalmente conscientes, como una pregunta directa, y otros que aparentemente nos pueden pasar desapercibidos. Pero siempre provocan una respuesta en nuestra memoria.
¿Es esto así? No respondáis según lo que creáis o no. Dejemos la memoria a un lado. Investiguemos seriamente.
Estoy dando un paseo, disfrutando, y de repente salta el pensamiento: "tienes esta tarea aún por cumplir". ¿De dónde vino este pensamiento? ¿Apareció espontáneamente o surgió debido a un estímulo del que no me he dado cuenta en un principio?
Esto además me lleva a otra pregunta: ¿Los pensamientos pueden ser estímulo para provocar otros pensamientos?
¡Ánimo y pasión en las investigaciones!
Gracias a todos por estar ahí fuera, ya sea participando activamente o leyendo nuestras cavilaciones.

12 comentarios:

Juan Miguel dijo...

¿Estamos realmente "fuera"? ¿O estamos dentro, también? Podría ser un juego del Señor Ego, el vernos fuera; y si nuestra mente fuese parte de otra mente superior a la nuestra, que nos invita a pensar todo el día y noche de ser posible?
Estoy tratando de ayudar aportando a tu investigación, algo distinto de la distancia de la Tierra a Plutón, que en términos reales a nadie le importa, salvo al que deba viajar a Plutón.
Saludos

Luis Miguel dijo...

Querido amigo Juan Miguel. Muchas gracias por tu participación. Como pretendía haber explicado antes, no se trata de sacar teorías, así sin más y ver qué pasa.
Quiero saber, apartarme de creencias y de esas mismas teorías, investigar y aprender.
¿Para qué?
No para viajar a Plutón. Ja,ja.
Me explico: como puedes haber imaginado este viaje ya lo emprendí hace tiempo. Ya investigué y ya descubrí. Ahora lo que pretendo es volver sobre mis pasos, y enseñar. Pero no en plan discurso, imponiendo, sino debatiendo. Poniendo en duda cada descubrimiento, compartiendo. ¿Ves?
Muchos de los males que nos acechan como seres humanos parten del plano psicológico. Somos infelices, egoístas, agresivos. ¿Por qué?
¿Puedes responderme?
Desde el inicio de los tiempos las religiones, la política, las distracciones, nada de eso ha servido de nada. Seguimos tan destructivos en la era digital como lo éramos en la edad de piedra.
El pensamiento, la forma de actuar de este mecanismo, tan maravilloso como destructivo tiene mucho que ver. Pero, ¿quién soy para imponer una idea, o para establecer una teoría?.
Por eso empiezo preguntando "¿qué es el pensar?". Discutamos, analizemos, puedo estar equivocado. Pero no nos dejemos llevar por las ideas de otros. Eso no ha funcionado antes.
"¿Qué es el pensar?"
Es un punto de partida,no para viajar a otro planeta. Pero sí para viajar a nuestro interior y a descubrir como ser felices y a encontrar la paz.
Gracias por estar ahí fuera iluminando el camino.

sky walkyria dijo...

pensar puede llegar a ser un discurso interminable que se retroalimenta
y crea un habito
que filtra la percepcion...

Silvi (reikijai) dijo...

El Ego es lo que creemos ser. Al decir “YO” es directa conexión con nuestro cuerpo físico… Al ponernos en movimiento, nos déjanos llevar por la rutina. …. por lo que conocemos… lo que nos han enseñado… padres… maestros. … la vida. La realidad es negar nuestra propia esencia… nuestra propia naturaleza. …Nos debemos concienciar que somos mucho más que cuerpo físico; que somos libres. … El día que nos demos cuenta de ello seremos totalmente libres… cuerpo mente y espíritu. …en este aprender a mirarse.
Todos tenemos una llave… todos vemos la puerta… fuimos conducido por nuestros mayores a esta ella… pero esta en nosotros poner la llave y hacerla girar nadie puede abrir esa puerta… mas que nosotros… es nuestra decisión… es nuestro tiempo y de nadie mas… nadie puede vivir por nosotros… son nuestras experiencias… es nuestra vida. … Todo en la vida tiene un tiempo… nada es fácil… tampoco imposible… ni tampoco todo es ya… un mañana nos levantamos y lo que hasta ayer no se entendía… lo que no nos dejaba ver mas allá de nuestras propias narices … hoy… tiene claridad. … Si nos sumamos a ese movimiento no lineal, el ego comienza a sobrar. … Es ahí, donde el trabajo con nosotros mismos se hace duro. … La relación con nosotros mismos…con los demás… las creencias…el deseo innecesario de transigir con los demás… Este trabajar el EGO es una lucha sin cuartel… En todo momento estamos en conexión con nosotros mismos, pero no somos conscientes. … Llevamos el timón de nuestro propio barco y no nos damos cuenta… somos quien marcamos la ruta a tomar… y los lugares a visitar… Tendemos a creer que algún otro digito todo, que somos ajenos a su recorrido.
Simplificado nuestra vida es eso, un ir y venir… de llegadas y de partidas… Somos el capitán… de este barco… “Nuestras Vida”… y vamos creando según el tiempo… con las herramientas que nos dio la vida. … Debemos estar atentos… debemos aprender a mirarnos. … Nuestra vista recibe en todo momento imágenes físicas, y nuestro corazón imágenes emocionales. … Así como veo a los demás… es como me veo “Yo”…es la que me representa en mi propia forma de consciencia…. Esto nos revelará la visión limitada que tenemos de lo que somos… De esta forma uno puede ver cuanto tiempo se dedica…para ver esto mira tu propio espejo, observa cuanto esperas de los demás…. el pasado no existe, al igual que el futuro. Es un presente continuo con el que hay que lidiar… uno se desprende del ego y se reconecta con su verdadero ser…. En eso estamos… Así que levantar velas y a la mar…
SilviaZak.

Fragmentos de "El Poder del Ahora":

"Tu forma de SER es siempre una enseñanza más vital y transforma el mundo más poderosamente que lo que dices; es más esencial aún que tus acciones".

"Si te sientes llamado a aliviar el sufrimiento del mundo, esa es una tarea muy noble, pero recuerda que no has de enfocarte exclusivamente en lo externo; de otro modo no encontrarás sino frustración y desesperación. Sin un cambio profundo en la conciencia humana, el sufrimiento del mundo es un pozo sin fondo".

"Si estás apoyando un movimiento destinado a impedir que los humanos más profundamente inconscientes se destruyan a sí mismos y al planeta, o que sigan produciendo sufrimiento a otros seres sensibles, recuerda: así como no puedes luchar contra la oscuridad, tampoco puedes luchar contra la inconsciencia. Si tratas de hacerlo, los polos opuestos se fortalecerán y atrincherarán todavía más. Te identificarás con una de las polaridades, te crearás un "enemigo" y te verás arrastrado hacia la inconsciencia. Eleva la conciencia distribuyendo información o, a lo sumo, practica la resistencia pasiva. Pero asegúrate de no albergar resistencias internas, ni odio, ni negatividad".

"El mundo tal como se nos presenta actualmente es principalmente un reflejo de la mente egotista. Y como el miedo es una consecuencia inevitable de la ilusión del ego, vivimos en un mundo dominado por el miedo. Nuestra realidad colectiva es, en gran medida, la expresión simbólica del miedo y de las pesadas capas de negatividad que se han ido acumulando en el psiquismo humano colectivo. Cuando la mayoría de los seres humanos se liberen de la ilusión del ego, este cambio afectará a toda la creación".... Te dejo un Beso ... Silvi.

Pedro Estudillo dijo...

Madre mía, qué profundidad está adquiriendo esto. ¿Realmente es todo tan complicado?
Yo muchas veces ya no sé si soy yo el que pienso o es "algo" ajeno a mí lo que me hace pensar... Claro que también ese "algo" pudiera ser lo que llamo "yo"... Es decir, primero tendría que definir qué es "yo" para poder decidir si pienso por mí mismo o no... Sea como sea, la mayor parte del tiempo, mis pensamientos me dominan a mí, y yo no puedo hacer nada por evitarlo, lo que me da mucha rabia e impotencia, o sea, que van por libre... ¿o no?
Lo dicho, esto es demasiado complicado para mí. Por favor, que alguien me aclare algo... pero que no me haga pensar (¿es eso posible?).
Un abrazo para todos.

Luis Miguel dijo...

Créeme amigo Pedro que todas las preguntas que haces tienen respuesta.
Y no es nada complicado, todo lo contrario. Es de una simpleza...
Somos nosotros quienes nos gusta complicarlo todo con teorías, enunciados, metáforas y conceptos.
Iremos despacio, no te preocupes.
Un pasito de cada vez.

Anónimo dijo...

Todo es tan simple o tan complicado como queramos "pensarlo".
Cada una de las preguntas que podamos formular no tiene una, sino tantas respuestas como enfoques le queramos dar.
Nada es como es, sino como se percibe.
Aprender...¿qué teoría?,...¿la de quién?,
o...¿crear una teoría propia, investigar y aprender, para luego necesitar enseñarla, y así reforzar mi EGO?
Si amásemos más y pensásemos menos, quizás este blog no existiría porque compartiríamos y disfrutaríamos nuestro tiempo con los que tenemos cerca, libres de prejuicios y "cacaos" mentales. Entonces seríamos más libres y más felices, o sea, más primitivos.

Saludos.

Pepito Grillo

Maria dijo...

La observación de un bebé desde que nace creo que ha respondido a muchas de las preguntas que me he hecho sobre el pensamiento. Al principio todo son impulsos y gritos por la supervivencia. Poco a poco al verlos pensar los adultos sonreímos, en mi caso absolutamente ignorante de lo que estaba pasando. Una anecdota que creo que viene al caso. Mi hijo pequeño me pide no recuerdo ya qué. Tendría entre 3 y medio y 5 años. Le respondí que mañana lo tendría (para quitármelo de encima, supongo, como tantas madres). Al día siguiente vino corriendo al despertarse y gritaba eufórico: ¡¡"mamá, mamá HOY ES MAÑANA"!!

Luis Miguel dijo...

Querido amigo Pepito, gracias por tu acertado comentario, como siempre dando en el clavo.
No se trata de buscar teorías para luego necesitar enseñarlas. De eso ya tenemos bastante. ¿O no?
¿No aprendemos teorías de otros constantemente?
Sio soy del barça, o del madrid, o del rayo, del pp o del psoe. Católico, budista o musulmán. Todas teorías que aprendemos, lo queramos ver o no.
¿Eres feliz? ¿Estás libre del odio, del apego, de la ira, de la instosfacción, de todo eso?
Porque si es así, por favor, compártelo con los demás. ¿Cómo lo has hecho?
Pero no con teorías, si no con hechos. Con algo tangible que cualquiera pueda comprobar.
Teorías y supuestos ya nos sobran.
Si digo que un estímulo provoca una respuesta de la memoria... ¿es eso una teoría? No lo sé, habrá que comprobarlo...
Ojalá y todo el mundo fuese como dices. Entonces no sé si este blog existiría. Por lo menos no lo haría como ahora.
Ya no tengo un ego que defender, lo siento. Pero sí ganas de ayudar a los demás a cruzar a la otra orilla.
Quizá estoy equivocado. No lo sé...
De momento seguiré haciendo lo que hago. Lo haría aunque no hubiera nadie al otro lado.
Y seguiría agradeciendo, a todos por estar ahí fuera. Sobretodo a ti, amigo, porque tus palabras son muy necesarias.

marpa dijo...

Pensar a veces es recordar, y otras imaginar. Pasado y futuro.

Muchas veces los patrones mentales que hemos ido desarrollando cobran vida e inundan el espacio mental con pensamientos teñidos de carga emocional, desbordandonos.

Hay que intentar "pensar sin pensar", o lo que es lo mismo, ver la naturaleza del pensamiento, y de esta forma este se autolibera.

De esta forma dejamos de estar en el pasado, el futuro o el presente y nos establecemos en el Aquí-Ahora.

Un saludo

Ps: A veces el Ego mas difícil de cortar es el "ego espiritual", que nos suele acompañar hasta llegar a la cumbre del despertar.

Anónimo dijo...

Querido amigo Luis Miguel:

Creo que no has entendido mi comentario. Mis preguntas son meramente retóricas, es decir: ni espero una respuesta, ni por supuesto la tengo. Es mi torpe manera de expresar lo complicado que me parece el pensamiento humano, y lo que además podemos llegar a complicarlo.

"¿Eres feliz? ¿Estás libre del odio, del apego, de la ira, de la instosfacción, de todo eso?
Porque si es así, por favor, compártelo con los demás. ¿Cómo lo has hecho?
Pero no con teorías, si no con hechos. Con algo tangible que cualquiera pueda comprobar."

Ojalá pudiera contestarte que sí a todo esto. Si supiera cómo hacerlo, claro que lo compartiría, y lo pregonaría a los cuatro vientos, arriesgándome incluso a que mis teorías no se pudieran comprobar empíricamente.
Pero no. Soy un ser humano normalito y lleno de debilidades que, según el tono de tu respuesta, me llevan a parecer prepotente (por cierto, hablaba de mi ego, no del tuyo). Pido disculpas por ello.

Y después de esto, no sé si atreverme, pero me gustaría preguntarte, con toda la humildad del mundo y sin suspicacias, qué significa cruzar a la otra orilla.

Gracias por estar ahí, al otro lado, y disculpa mis torpezas.

Saludos

Luis Miguel dijo...

Un saludo a todos desde el corazón.
Amigo Pepito, no tienes por qué pedir disculpas de ningún tipo. Hace unos minutos hablaba por teléfono con un gran amigo, y seguidor de nuestras cavilaciones, que no discusiones. Le contaba cómo aprecio tus entradas y tu forma de ver las cosas. Me reitero en lo que te he escrito más de una vez, tus comentarios son muy necesarios.
Si acaso, quien tiene que pedir disculpas es mi pequeño yo infantil por hacer que mis respuestas parezcan lo que no son.
Cruzar a la otra orilla es una metáfora budista. Si las personas ordinarias (comunes es mejor término) sufren constantemente por ignorancia, debido al contenido de sus mentes, ayudarles a esclarecer ese error, darles la oportunidad de alegría y paz que merecen, viene a decir llevarles a "la otra orilla".
Leí una vez que Buda sería el barquero y el Dharma (conjunto de enseñanzas) la barca que nos ayudan a cruzar el río del sufrimiento, llevándonos a un lugar seguro (Nirvana).
Gracias por estar ahí fuera, en tierras cordobesas.