jueves, 13 de octubre de 2011

A la luz de la luna...

Hola a todos:


Hace ya muuuucho tiempo que no me asomo a esta ventana. No existe una razón en particular para este llamémosle "descanso", ni implica que ya no viaje a mi interior, que no profundice, que no observe o analice, o que todo me resbale.


No, no es eso para nada. Tal vez sólo ocurra que durante un tiempo no haya exteriorizado lo interiorizado, eso es todo.


No ha ocurrido hoy nada distinto ni especial, salvo un buen susto cuando casi atropellan a mi pequeño cachorro, Golfo, pero afortunadamente, todo ha quedado en eso, un susto, que hará que tome más precauciones cuando lo lleve a pasear.


Pero sí ha sido hoy uno de esos días que deseas terminen cuando al cerrar los ojos un dulce sueño borre esa sensación de no estar bien, esa especie de opresión que produce el cansancio, o la acumulación de energía negativa.


Hace ya algún tiempo que sorprendida descubrí que la razón de esos malos días no es otra que la carga de energía que acumule. Y parezco tener una especial capacidad de atracción para eso.


Un amigo me habló un día de los vampiros, no de sangre sino de energía. Me contó que hay gente que roba la energía de los demás y te contagia su mala energía. Suena un poco a eso, a película de vampiros, pero es tan real como respirar o la luz del sol.


No se si esos vampiros son conscientes de cómo actúan, tal vez no conozcan otra forma de alimentar su alma. Yo sí conozco otras, yo sé cómo hacer para recargar mis pilas de buena energía sin descargar a nadie. De hecho cuando me siento cansada de ánimo, que no del cuerpo, lo alimento con todo aquéllo que amo, con lo que es capaz de emocionarme, cosas tan simples y a la vez tan importantes como ver un atardecer, hablar a la luz de la luna, cenar con ese alguien especial que todos tenemos, o unas risas con unos amigos.


Desde luego hace tiempo que se que las cosas son lo que son, con independencia de lo que en cada momento me puedan parecer, y que, por tanto, mirar hoy el mundo no sería inteligente ni sano, porque seguro que lo único que aprecio es todo lo que de malo tiene.


Mejor me iré temprano a leer en la cama, para después cerrar los ojos a un buen y dulce sueño. Mañana los abriré con otro color, me despertaré contenta, descansada y una vez mas con ganas de descubrir todo lo que el mundo me puede aún impresionar ... a la luz de la luna.


Muchísimos besos a todos. Buena luna

4 comentarios:

Luis Miguel dijo...

Gracias por volver a asomarte a este blog, que empezó siendo tan tuyo como mío.
Espero que sigas escribiendo más a menudo.

mariola dijo...

Hola: Pues claro que sí, sólo fue un descanso tal vez un poco largo.
Muchos besos

Hada Saltarina dijo...

MARIOLA,

Ya sabemos eso de los ciclos, pero ¡a veces cuesta tanto asimilarlo! Y más con la entrada del otoño.

Besos

añil dijo...

Y aunque parezca que todo está oscuro, somos conscientes que pasará y la luz volverá más intensa aún.

Un beso y encantada de volver a leerte.